Eclesiastés 5: 3-5
3 Porque de la mucha ocupación viene el sueño, y de la multitud de las palabras la voz del necio. 4 Cuando a Dios haces promesa, no tardes en cumplirla; porque él no se complace en los insensatos. Cumple lo que prometes. 5 Mejor es que no prometas, y no que prometas y no cumplas.
Comentario
Existen hermanos que ante el templo en presencia de Dios y los demás creyentes, se prestan a expulsar palabras las cuales solo quedan en el proyecto de una posible ejecución, el Señor no premia el simple hecho de que tu boca lo diga, ser sinceros al ejecutar de las buenas acciones, es lo que bendice nuestro Dios.
Por tanto cumple más y habla menos.
Amén
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