3.23.2015

Misericordiosa justicia de Dios.

Babilonía.
Profecía de Daniel.

Susana - Dios eterno, que ves lo escondido, que lo sabes todo antes de que suceda, tú sabes que han dado falso testimonio contra mí, y ahora tengo que morir, siendo inocente de lo que su maldad ha inventado contra mí.

Daniel - Ahora vuelven tus pecados pasados, cuando dabas sentencias injustas condenando inocentes y absolviendo culpables, contra el mandato del Señor: "No matarás al inocente ni al justo."

Les invito a leer Daniel 13, 1-9, 15-17. 19-30. 33-62.

Comentario:
La ley del hombre se ha basado en reformas desde sus primeras normativas establecidas en los antiguos imperios de oriente. En su mayoría aboga por un orden que establece la minoría que bajo su poder lo imponen para sus beneficios particulares.

Pero desde un principio, aún con los códigos de comportamiento que los mismo mandamientos entregados a Moises, el hombre ha tenido bien claro definir (juzgar) a un criminal por sus delitos, en la práctica a menudo vemos la injusticia de no honrar estas legislaciones y obrar de forma arbitraria, lo podemos ver adiario en los tribunales de nuestro país.

Demos gracias al Señor, por mostrarnos a personajes como Daniel, los cuales nos muestran la misericordía y la grandeza de Dios, de defendernos cuando obramos en obediencia.

Nunca perdamos la esperanza en la justicia divina de nuestro Señor, independientemente de las inequidades y atropellos de la ley del hombre, las cuales son pasajeras como la vida misma en este mundo, donde nuestro cuerpo material volverá al polvo y nuestro espíritu al Padre.

#DiosBendiga

Bendecido inicio de semana.

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